Los móviles no solo han revolucionado nuestra forma de vivir o comunicarnos, también han entrado en nuestra forma de relacionarnos sentimentalmente. Parece ser que ligar en la discoteca o en un bar ha pasado de moda. Ahora los match son la nueva forma de quedar con alguien o decirse que se gustan.
El primero en cambiar la forma de ligar fue Tinder, que en 2012 apareció como una novedosa app. Desde allí, al menos el 35.3% de los 80,2 millones de usuarios de internet han instalado alguna de las dating apps disponibles en el mercado, según un informe de The Competitive Intelligence Unit, mejor conocida como The CIU.
¿Cómo saber que te están acosando en redes sociales?
Las apps comparten información personal con terceros
Pero, ¿qué tan malo puede ser el uso de apps para ligar? No estamos para juzgar su razón de ser. No obstante, cuando se trata de Internet siempre hay que tener cuidado. Existen riesgos que debemos tomar en cuenta al momento de registrarnos en estas aplicaciones.
Aplicaciones como Tinder, OKCupid y Grindr comparten información confidencial de sus usuarios, así lo explica un informe del Consejo de Consumidores de Noruega. Este consejo denuncia que tales apps comparten datos de dirección IP, localización, sexualidad y otro tipo de información personal.
Sin embargo, estas compañías no incumplen alguna legalidad, ya que en sus acuerdos y sitios web dejan claro sus políticas de privacidad (esas que nadie lee).
Pérdida de privacidad. Como ya comentamos, estas apps te piden una serie de datos personales, pero siempre está de tu parte qué tanto compartes. Por eso, es indispensable siempre leer los términos y condiciones de privacidad para saber qué información se comparte y con quién.
Ataques de malware. Muchos ciberdelincuentes aprovechan las apps para ligar para enviar a los usuarios alertas o emails solicitando la actualización de la aplicación o la contestación a un mensaje. Un gancho que en realidad busca que te descargues un malware en tu dispositivo.
Apps fraudulentas. Existen aplicaciones falsas vinculadas a las apps para ligar. ¿Cómo funcionan? Se trata de herramientas que prometen ampliar la información de las personas que han visitado tu perfil o por las que tienes interés. Una vez que las usas, roban toda la información personal sobre ti.
Activación del GPS. La mayor parte de las aplicaciones tienen acceso a la geolocalización del móvil. Una fuente de información privada para los cibercriminales ya que de esta manera pueden conocer dónde vives, trabajas o pasas la mayor parte del tiempo.
¿Cuáles son las apps más peligrosas para tus datos?
Robo de información bancaria. Al igual que ocurre con el GPS, algunas aplicaciones tienen acceso a los datos de pago almacenados en los dispositivos. Por eso es relativamente fácil que un hacker consiga hacerse con esa información para realizar pagos no autorizados.
Suplantación de identidad. Un cibercriminal es capaz de cambiar el contenido y las imágenes de tu perfil y usurpar tu identidad para comunicarse con otras personas. También puede utilizar esta información para dañar tu reputación. E incluso para estafar a otras personas haciéndose pasar por ti.
Control remoto del micrófono o cámara de foto. Las vulnerabilidades que tienen estas apps para ligar permiten que otra persona pueda acceder a la cámara y micrófono de tu dispositivo, aunque no estés usando la aplicación de contactos en ese momento. Lo que se traduce en una puerta abierta para que espíen tu intimidad.
Ciberacoso y sextorsión. Nunca estás 100 % seguro de quién está al otro lado del perfil. Por eso debes tener especial cuidado con el contenido que compartes en estas apps para ligar. El intercambio de fotografías íntimas o de información sensible puede derivar en delitos como el acoso sexual o la extorsión. Algo que también puede ocurrir en la práctica de sexting.