LinkedIn es una de las herramientas más usadas en el mundo para buscar trabajo. La plataforma ofrece un lugar para dar visibilidad a las experiencias y conocimientos profesionales a través de la creación de redes de contactos. Una red social especializada para el ámbito laboral. Además de esto, es una ventana para conectar con empresas, reclutadores y recibir ofertas adaptadas a nuestros perfiles profesionales.

Desde su fundación en 2002, su éxito ha sido visto en el aumento del número de usuarios. En 2021 tiene más de 700 millones de personas conectadas. Sin embargo, sabemos que estos escenarios son perfectos para llevar a cabo estafas digitales. Es habitual encontrar ofertas “sospechosas” y conectar con gente que no conocemos. Algunos estafadores se hacen pasar por reclutadores para engañar a las personas y lograr obtener sus datos personales.

Cibercriminales con corbata

“Con estas cuentas falsas en LinkedIn, los estafadores pueden dar una sensación de credibilidad entre profesionales para iniciar conexiones adicionales”, informa un fabricante de software de seguridad Symantec. Su objetivo es tener tu información personal, de contacto y de tu red, “lo cual incluye direcciones de correo electrónico personales y profesionales, así como números de teléfono”, que se puede utilizar en correos electrónicos de suplantación de identidad.

"Así como los solicitantes de empleo utilizan LinkedIn para conectarse con excolegas y empleadores potenciales, los estafadores también usan el servicio para encontrar posibles víctimas", explica la organización Better Business Bureau (BBB).

Los cibercriminales buscan con más frecuencia a las personas que están buscando empleo en la plataforma. Crean sus perfiles falsos en LinkedIn dando una imagen “creíble” y persuaden. Otros se encargan de enviar vínculos a sitios web fraudulentos. Ambos con el mismo objetivo: robar información.

Acá dejamos algunas recomendaciones para evitar caer en este tipo de estafas en LinkedIn:

1. Agregar solo a conocidos: esta es una recomendación simple, pero efectiva. Mientras más control tengamos de las personas de nuestra red, mejor. Solemos enviar solicitudes sin ningún recato y esto podría ser un riesgo para nuestra seguridad digital. LinkedIn, a pesar de ser una red social “más profesional” no está exenta a los perfiles falsos.
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3. La foto de perfil comunica: además de darle un rostro a la cuenta, la foto de perfil puede hablarnos. Muchas veces estos estafadores no usan foto en sus perfiles, utilizan bancos de imágenes o extraen esta información de otra cuenta.
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5. Verificar la información: ¿Los textos publicados son auténticos? ¿Tienen congruencia? Para verificarlo, copia y pega una sección del mismo en un motor de búsqueda y mira si ya se usó antes. Investiga al perfil. ¿Usa otras redes sociales? ¿de qué forma está activo en ellas?
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7. Las “oportunidades únicas” pueden ser las más riesgosas: para ello te recomendamos que mires más de cerca estas ofertas que parecen demasiado buenas para ser ciertas. Como dijimos antes, LinkedIn no está exento de los cibercriminales, ellos seguirán haciendo de las suyas mientras las personas sigan cayendo en estos mecanismos. Otra opción es solicitar una llamada o una entrevista online para salir de dudas ante propuestas demasiado prometedoras.
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9. Protégete, cuida tus hábitos: El sentido común es la clave de todo, mira el comportamiento de tu red, ¿notas algo extraño? En LinkedIn, existen formas de limitar quiénes pueden enviarte mensajes y ver la información que compartes. Comprueba todo antes que puedas ser una víctima del robo de datos.
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¿Cómo denunciarlos?

Otra forma de atacar, además de detectar a los cibercriminales, es denunciar. El sitio dispone un apartado de ayuda en estos casos. Si descubres que fuiste estafado, puedes denunciarlo. Marcar los perfiles como inapropiados o falsos en el sitio web de LinkedIn, es un paso importante para poner fin a este tipo de crimen.